martes, 6 de mayo de 2014

Economía Social y Economía Popular.

República Bolivariana De Venezuela.
Ministerio Popular para la Educación Universitaria
Universidad Bolivariana de Venezuela.
“Hugo Rafael Chávez frías”
Fundación Misión Sucre
Formación de Grado en Estudios Jurídicos
AUB Dr. Luis Beltrán Prieto Figueroa
El Espinal Municipio Díaz
Estado Nueva Esparta.
IX Semestre en Estudios Jurídicos






Economía Social y Economía Popular.


CÁTEDRA: Economía Social y Desarrollo Endógeno.


Facilitador: franklin Marín valdiviezo.




Integrantes:


Bermúdez Marisela 
Marín Felicita 
Morgado Francy 





Fecha: El Espinal 20 de Marzo de 2014.



INTRODUCCION

            Las organizaciones de la economía social son las que reconocen explícitamente las dimensiones sociales de las actividades económicas, a partir de reglas como las que rigen las cooperativas y la mayoría de las organizaciones sin fines de lucro. El objetivo principal de estas es el mejoramiento de la calidad de vida y del bienestar de la población adquiriendo la significación de herramienta para la derrota de la pobreza no sólo económica,  sino también cultural, política, ideológica.

            La importancia de esta investigación es conocer la transformación económica  que se llevan adelante en Venezuela para promover el desarrollo económico, social y sustentable del país.















  
ECONOMÍA SOCIAL Y ECONOMÍA POPULAR. SIMILITUDES, DIFERENCIAS Y CONSIDERACIONES CRÍTICAS.

            La economía popular es el conjunto de actividades de producción, distribución o consumo que realizan las  personas y organizaciones. Cuando la economía popular pone en juego como elemento central el apoyo mutuo, la cooperación y diversas formas de compartir (conocimientos, mercados, tecnología), coloca en escena una “Economía Solidaria” también llamada Economía Social.

            La Economía Social es concebida como un instrumento para la atención de las necesidades de la población excluida económicamente, mediante la creación de empleo productivo y sustentable; así mismo, es una vía para la generación de excedente económico que apuntale la creación de capital social.

            Las Unidades Económicas Asociativas (cooperativas, micro, pequeñas y medianas empresas) constituyen la unidad básica del Sistema que configura la Economía Social. Se caracterizan fundamentalmente por su carácter participativo, que las lleva a comprometerse con la calidad de vida de sus integrantes, asociados, trabajadores, y con las comunidades en las cuales operan; son socialmente responsables, siendo esta pauta de conducta la medida para que quienes conforman la actividad económica se sientan protagonistas en el empeño por una sociedad más cohesionada y solidaria, que junto con el compromiso fundamental de generar capital social y empleo, también adquiera conciencia de su responsabilidad por atender y mejorar el bienestar de la población y de las condiciones de su entorno, de tal forma que el equilibrio entre lo social y lo económico contribuya a potenciar la inclusión y la cohesión social en los espacios comunitarios, para vincular la creación de riqueza con su distribución.

            La estrategia en este caso es maximizar el factor solidario para lograr la satisfacción de las necesidades básicas y generar acumulativamente procesos de desarrollo y conseguir en conjunto lo que individualmente no es posible lograr.

            Se puede decir que La economía solidaria es la “Economía Del Compartir”:

ü  compartir el trabajo (producción)
ü  compartir los frutos del trabajo (distribución, consumo).

Entonces podemos desarrollar, Economía social y Economía Popular,  sus similitudes, Diferencias y Consideraciones Criticas en;
La Economía Popular: Es un sistema de producción, distribución del valor creado, comercialización, abastecimiento y consumo, protegido   por el Estado Venezolano, cuyo objetivo es la satisfacción de necesidades sociales para el desarrollo humano integral y una existencia digna y provechosa para la colectividad, se manifiesta en relaciones de producción fundamentadas en la cooperación, solidaridad, equidad y acumulación colectiva.
Es una construcción de los trabajadores, trabajadoras y de la comunidad, quienes desarrollan diversos tipos de actividad económica productiva, bajo la figura de asociaciones tales como: Cooperativas, Cajas de ahorro, Mútales, Unidades Económicas de Asociativas, UEAs) no legalizadas, Empresas de Producción Social.
Los agentes protagónicos de la Economía Popular, se orientan al logro del desarrollo armónico de la Economía Nacional con el fin de general:
 Una sociedad justa y amante de la paz,
 Fuentes de trabajo digno, valor agregado creciente,
Nueva calidad de vida de la población, soberanía económica del país.

El Art. 3 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela Establece: “El Estado tiene como fines esenciales la defensa y el desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad, el ejercicio democrático de la voluntad popular, la construcción de una sociedad justa y amante de la paz, la promoción de la prosperidad y bienestar el pueblo y la garantía del cumplimiento de los principios, derechos y deberes recocidos y consagrados en esta Constitución”
Las formas de economía popular o de subsistencia persiguen: 
ü  Producción de bienes y servicios de calidad a los cuales pueda acceder de forma expedita la comunidad mediante formas variadas (compra barata, trueque, mutualismo, apoyo solidario)
ü  Valoración de las relaciones de producción mediante el estudio del modelo de consumo y el reparto de excedentes

ü  El reparto equitativo del excedente que genera el modelo de producción; la solidaridad comunitaria con otras comunidades del entorno.

ü  La autonomía cognitiva, la libertad operativa y soberanía comunitaria para articular y adelantar un modelo de desarrollo local sostenible.
El estado venezolano ha realizado esfuerzo en superar el actual modelo económico para acabar con la dependencia insostenible de las importaciones  desarrollando el proyectando economía social.

La Economía Social y Su Vinculación con la Transformación del Sistema Socio Económico Desde Una Visión Popular y Participativa.

La economía social o solidaria constituye una temática que desde el poder constituyente se inserta en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV, 1999). Su génesis y desarrollo es anterior a la Revolución Bolivariana, pero se imbrica en ella a partir de las manifestaciones de 1989 y 1992. A partir de 1999, la economía social constituye núcleo fundamental de los discursos sobre prácticas emergentes de producción.

Para concretar esta economía social se han desprendido de la CBRV, nuevas formas jurídicas e institucionales para darles viabilidad a saber:  Ley Especial de Cooperativas, Ley de los Consejos comunales, Ley de Comunas, entre otras con la finalidad de rescatar los valores y practicas locales comunitarias  o del lugar con sus procesos y valores solidarios, cooperativos y humanistas, y que desde la educación revertir los antivalores del modelo económico global promoviendo la liberación del hombre de la esclavitud de los mercados.
Capítulo VII
De los derechos económicos

 Artículo 118. “El Estado promoverá y protegerá las asociaciones solidarias, corporaciones y cooperativas, en todas sus formas, incluyendo las de carácter financiero, las cajas de ahorro, microempresas, empresas comunitarias y demás formas asociativas destinadas a mejorar la economía popular.” En él se menciona el término economía popular.

 Así mismo se incluye en el Art. 184 ordinar 3 de la CRBV y se promueve la participación en los procesos económicos, mediante el estímulo de expresiones de la economía social, tales como cooperativas, cajas de ahorro, mutuales y otras formas asociativas; además que se plantea la promoción de las organizaciones de la economía social por medio de las políticas de Estado
ü  Menciona la creación de mecanismos abiertos y flexibles para que los Estados y los Municipios descentralicen y transfieran a las comunidades y grupos vecinales organizados los servicios que éstos gestionen previa demostración de su capacidad para prestarlos, promoviendo:
ü  La participación en los procesos económicos estimulando las expresiones de la economía social, tales como cooperativas, cajas de ahorro, mutuales y otras formas asociativas.
ü  La participación de los trabajadores y trabajadoras y comunidades en la gestión de las empresas públicas mediante mecanismos autogestionarios y cogestionarios.
ü   La creación de organizaciones, cooperativas y empresas comunales de servicios, como fuentes generadoras de empleo y de bienestar social, propendiendo a su permanencia mediante el diseño de políticas donde aquellas tengan participación.

A su vez  La Carta Magna, en su artículo  299, 300 y 308, (Capítulo I “Del régimen socioeconómico y la función del Estado en la Economía, del Título VI, “Del Sistema Socioeconómico”) establece que

Del Régimen Socio Económico y la Función del Estado en la Economía

            Artículo 299. El régimen socioeconómico de la República Bolivariana de Venezuela se fundamenta en los principios de justicia social, democratización, eficiencia, libre competencia, humano integral y una existencia digna y provechosa para la colectividad. El Estado conjuntamente con la iniciativa privada promoverá el desarrollo armónico de la economía nacional con el fin de generar fuentes de trabajo, alto valor agregado nacional, elevar el nivel de vida de la población y fortalecer la soberanía económica del país, garantizando la seguridad jurídica, solidez, dinamismo, sustentabilidad, permanencia y equidad del crecimiento de la economía, para garantizar una justa distribución de la riqueza mediante una planificación estratégica democrática participativa y de consulta abierta.

            Artículo 300. La ley nacional establecerá las condiciones para la creación de entidades funcionalmente descentralizadas para la realización de actividades sociales o empresariales, con el objeto de asegurar la razonable productividad económica y social de los recursos públicos que en ellas se inviertan. Este artículo ratifica al Art. 184.

            Artículo 308. El Estado protegerá y promoverá la pequeña y mediana industria, las cooperativas, las cajas de ahorro, así como también la empresa familiar, la microempresa y cualquier otra forma de asociación comunitaria para el trabajo, el ahorro y el consumo, bajo régimen de propiedad colectiva, con el fin de fortalecer el desarrollo económico del país, sustentándolo en la iniciativa popular. Se asegurará la capacitación, la asistencia técnica y el financiamiento oportuno.

            Aunado a esto  determina en el artículo 70 que son medios de participación, las organizaciones que pertenecen al sector de la economía social, haciendo mención a valores como cooperación y solidaridad, dejando ver la concepción de lo económico y social de manera más integral.

            Por su parte El Plan Nacional Simón Bolívar 2007 – 2013 en su línea estratégica sobre la construcción del nuevo modelo productivo socialista, cuyo enfoque es que “La producción en la búsqueda de lograr trabajo con significado se orientará hacia la eliminación de la división social del trabajo, de su estructura jerárquica actual y a la eliminación de la disyuntiva entre satisfacción de necesidad y producción de riqueza. El modelo productivo responderá primordialmente a las necesidades humanas y estará menos subordinada a la reproducción del capital” actualmente ese modelo productivo se amplía en el Plan  de la Patria 2013 – 2019 en el II Objetivo menciona el aceleramiento de Cambio del sistema económico capitalista y rentista por un modelo económico productivo y socialista y avanzar en la plena satisfacción de las necesidades básicas para la vida de nuestro pueblo: la alimentación, agua…..Expandir el poder popular a través de misiones y grandes misiones socialistas y el autogobierno en poblaciones y territorios específicos conformados por comunas. El III objetivo convertir a Venezuela en un país potencia en lo social económico y político; desarrollar el poderío económico nacional aprovechando de manera óptima las potencialidades que ofrecen nuestros recursos;  V objetivo  menciona la necesidad de construir un modelo económico productivo ecosocialista basado en la relación armónica entre el hombre y la naturaleza que garantice el uso y aprovechamiento racional óptimo de los recursos naturales respetando los procesos y ciclos de la naturaleza. Dentro de todo el proceso consolidar y desplegar la democracia participativa y protagónica en  Venezuela.

            La economía social  se vincula con la transformación del sistema socio-económico por medio de:
ü  La solidaridad: la acción individual y colectiva comprende la interdependencia como eje dinámico de la práctica solidaria y de cooperación.
ü  La autonomía: de cada persona, cada unidad de producción y de actividad, de cada unidad de territorio; explorando las potencialidades y desarrollando crecientes capacidades y nuevos instrumentos de acción.
ü  La igualdad: trabajar con las desigualdades y construir la paridad de derechos sobre el reconocimiento de las diferencias.
ü  El compartir: el trabajo, el tiempo, los beneficios y el riesgo.
Diferencia entre la economía social y la Economía Popular


Importancia  Estratégica que Tiene para el Estado la Consolidación  de una Economía Social, Solidaria y Participativa. (Seguridad Alimentaria).

            La Economía Social establece categorías muy claras en cuanto a sus formas de organización empresarial bajo los principios de solidaridad, complementariedad y cooperación en contra posición al de libre mercado y competencia. Su objetivo esencial es la búsqueda de la Soberanía y Seguridad Alimentaría.

            La economía social adquiere la significación de herramienta para la derrota de la pobreza no sólo económica, sino también cultural, política, ideológica; para la revisión de las formas de vida y el rescate de concepciones de progreso, bienestar, desarrollo y progreso fundadas en la propia historia nacional.

            Es decir, esta economía se constituye en estrategia articuladora de las propuestas emancipadoras nacionales y las concepciones revolucionarias que postulan un Estado que defienda la perspectiva local ante el avasallante imperio de lo global.

            Un modelo económico de ese tipo, de carácter solidario y compromiso social, no sólo permite derrotar la pobreza cultural, política, educativa, de modos de vida y económica, sino que garantiza la inclusión de todas y todos los venezolanos y venezolanas en la construcción de la patria bolivariana.
            El modelo de  economía social procura generar una respuesta efectiva para la emergencia social por la cual atraviesa gran parte de la población venezolana como resultado de un modelo limitado de productividad y desarrollo, el peso del servicio de la deuda externa y el cisma de la economía mundial en el presente. Por ello, las exigencias de eficacia y legitimidad de la acción económica del Estado desde la perspectiva ciudadana, se relacionan fundamentalmente a la necesidad de contar con un modelo económico, una orientación productiva, un sistema financiero y de garantías que realmente le permita impulsar la nueva racionalidad productiva.

            Para alcanzar un modelo económico alternativo se considera prioritario trabajar en dinámicas que permitan la reconstitución de los sujetos sociales centrales: los sectores más humildes y desposeídos que configuran la inmensa mayoría nacional.

            La importancia de la propuesta de economía social del gobierno bolivariano, es que constituye un avance importante en materia de justicia social e inclusión de grandes sectores de la sociedad a procesos productivos de carácter asociativo, y genera nuevas estructuras y capacidades organizativas, que si son aprovechadas desde los niveles subnacionales de gobierno, tenderán a construir el modelo de desarrollo alternativo, sustentable, autogestionario y humanista al cual se aspira en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, y en el cual el desarrollo endógeno, se presenta como una propuesta ideal para aprovechar nuestros recursos en todas sus formas, un desarrollo alternativo que rescata los valores, y propone una profunda transformación cultural, económica y social.
 La Economía Social
  Síntesis histórica.
 La Economía Social, data del siglo del XIX en Europa, de los movimientos obreros cristianos, socialistas y anarquistas, ya para el año 1900 había un salón en la exposición Universal de París que llevó su nombre. La Economía Social se definió como un concepto polisémico es decir, designaba diversas aproximaciones teóricas y disciplinarias que buscaban una interpretación integral del fenómeno más allá del mero hecho económico.

El término se utilizó para designar algunas prácticas económicas en donde prevalecía la democracia y el empresariado colectivo. Sin embargo, hasta el presente existe la ambigüedad en cuanto a su verdadera naturaleza, se le ha vinculado a diversas tendencias en el campo de las ciencias sociales, específicamente en la economía y la sociología. 

Durante el siglo XIX y principios del XX la economía social  tuvo entre sus principales exponentes a Charles Dunoyer, Charles Gide y L. Walras este último como representante de la escuela Liberal. De estos tres es Charles Gide entrado el siglo XX quien propone definir a la economía social como aquel conjunto de empresas y organizaciones cuyas reglas dan cuenta de los valores sociales. En este conjunto se ubicaron a las cooperativas, las mutuas y las Asociaciones.

En este sentido,  es posible identificar  cuatro  tendencias de la economía social:
1.- escuela social-cristiana que se inspiró fundamentalmente en los postulados de la doctrina social de la Iglesia Católica, esta tendencia hizo del consumo y los servicios la puerta de entrada a la economía social.
2.- la escuela socialista que se extendió dentro de los países germánicos y escandinavos a través de la democracia industrial y el capitalismo.[2] Esta tendencia privilegió la producción y la reorganización del trabajo.
3.- escuela liberal que postulaba la existencia de la economía social como un reforzamiento del rol del mercado en la asignación de los recursos escasos en la sociedad, en detrimento del Estado.
4.- escuela solidarista  postulaba que la economía social era la expresión de una conducta humana que propendía a la acción voluntaria, al servicio al prójimo y a la fraternidad.

La Nueva Economía Social

Con la decadencia y crisis del Estado del Bienestar en la misma década de los setenta, resurge el movimiento de la economía social con la misma fuerza que en su génesis, respondiendo a los mismos postulados de la vieja escuela del siglo XIX, no obstante, en esta oportunidad asume múltiples definiciones en función de las realidades culturales, políticas, institucionales y jurídicas de los países donde se pone de manifiesto el resurgir de este movimiento.

En ambos momentos históricos el autor Jacques Defourny establece dos condiciones para el desarrollo de la economía social. Por un lado, la economía social es hija de la necesidad, es decir, los miembros de estas organizaciones poseían un conjunto de necesidades insatisfechas, tanto en el siglo XIX como en el presente. Por el otro,  la  existencia de una identidad, reflejada no sólo en la conciencia de clases que los obreros del siglo XIX poseían, como también el sentido de  pertenecer a un grupo social que compartiese  una identidad colectiva o un destino común (como por ejemplo las cooperativas quebequesas que se agruparon en defensa de su lengua y su religión)

El autor establece dos aproximaciones para comprender el concepto, la primera es la jurídica-institucional: en ella establece que la economía social es el conjunto de organizaciones que asumen como fórmula jurídica o que al no existir otra buscan el reconocimiento institucional en las cooperativas, mutuas y asociaciones.

La segunda es una aproximación normativa, en donde se atiende a los principios rectores que las organizaciones que  componen a la E.S tienen en común, estos son:
a)    Finalidad de servicio a los miembros o al colectivo más allá del beneficio.
b)    Autonomía de gestión.
c)    Procesos de decisión democrática.
d)    Primacía de las personas y del trabajo sobre el capital dentro de la repartición de los beneficios.

 Economía Popular, Economía Solidaria y Economía Social en América Latina.

La Economía Popular
     
Con las crisis económicas, políticas y sociales que permanentemente sacuden a la región latinoamericana se ha observado el desarrollo de un polo económico alternativo muy distante del sector privado tradicional. Este polo surge fundamentalmente por la existencia de dos factores:
 a) la presencia de unos niveles bajos de ingresos familiar generalizados en la población y
 2) la necesidad de encontrar nuevas actividades y acciones que procuren evitar los signos de pobreza y exclusión. A este polo de la economía se le ha denominado economía popular.
 Esta es definida como el conjunto de expresiones económicas que ejerce una población en situación de exclusión social  que busca satisfacer unas necesidades mínimas  insatisfechas. En este sentido la economía popular se caracteriza por lo siguiente:

a)     La participación de la mayoría de los miembros de una familia en el proceso de producción, comercialización o venta de bienes.
b)     La existencia de una frágil base de capital económico.
c)     El ejercicio de las actividades económicas  alejados de los marcos formales, tanto jurídicos como fiscales.
d)     La inexistencia de detallados patrones de gestión empresarial, y
e)      La precariedad de los ingresos que reportan las actividades ejercidas.

se puede decir  que la economía popular es el instrumento que posee la población excluida socialmente para enfrentar medianamente los efectos que produce los bajos niveles de ingreso familiar, la ineficaz distribución de los ingresos nacionales y las desigualdades que genera el orden económico establecido.

La manifestación más significativa de la economía popular se halla en la actividad comercial informal, las microempresas personales y en las pequeñas empresas familiares. Las actividades específicas de comercio y producción son variadas y abarcan todo tipo de insumos que mayoritariamente son demandados por el resto de la población.

Existe en la actualidad un debate muy intenso a la hora de insertar al sector informal urbano dentro del contexto de la economía popular, por un lado están lo que le dan un tratamiento negativo al término, es decir, lo definen por todo lo que no es: (..)Lo no estructurado, lo no privado, lo no formal, lo no rentable, lo no público, lo no legal, lo no estético, lo no legítimo. (Barrantes: 41,1.997). Bajo este esquema la economía informal no está dentro de la economía popular, mientras que otros autores (Nissan y Larraechea) señalan que el sector informal  visto desde los actores que lo conforman y no desde lo estructural como se ha definido clásicamente  es la expresión más genuina de la economía popular

Por otra parte, el diagnostico de este sector, muestra que si bien es cierto la economía popular ha logrado que los niveles de exclusión social y de desigualdad no se profundicen en la población, también es cierto, que la orientación  que la han dado los Estados latinoamericanos a esta actividad, no ha sido la más conveniente.

Siguiendo a Nyssens, Fonteneau y Salam Fall se pueden distinguir cinco tipos de actividades dentro de la economía popular:

a.    Unas Organizaciones de economía popular (OEP): Ellas se desarrollan frecuentemente en la comunidad y el barrio, su campo de acción está ligado al consumo, la producción y la distribución de bienes y servicios. Las OEP nacen de la iniciativa de un grupo de personas que buscan satisfacer un conjunto de necesidades propias, sobre la base de la explotación de sus propias fuentes y la ayuda mutua.

b.    Las micro-empresas: Son unidades de producción y/o de comercialización de bienes y servicios, de tipo familiar (en donde eventualmente se produce la contratación de personas externas a la familia).

c.    Las iniciativas individuales: A diferencia de la micro-empresa familiar, estas nacen de una sola persona, que busca darse su propio puesto de trabajo sin la implicación directa de terceros.

d.    Las estrategias de Asistencia:  personas que tienen como recursos las instituciones de  la caridad ,etc.

e.    Las actividades ilegales: personas que se dedican al tráfico de drogas, hechos delictivos, robos, etc.

De esta tipología, se puede desprender la siguiente estructura de la economía popular:

                 OEP           Microempresas
familiares        Iniciativas
individuales    Estrategias de Asistencia       Actividades ilegales
Nivel de crecimiento  Talleres de autogestión          Talleres productivos   Choferes de taxi         Organizaciones que reivindican la vivienda           Trafico de drogas
Nivel de subsistencia  Grupos de consumo   Pequeñas tiendas       Pequeñas reparaciones           Beneficiarios de instituciones de la caridad     Ventas clandestinas
Nivel de sobre vivencia          Comedores populares Recogida de desechos           Vendedores de la calle            Mendicidad    Pequeños Robos

Para finalizar el tema de la economía popular, estos autores señalan que pueden existir  entre la economía social y la economía popular prácticas de economía solidaria, es decir, que la convergencia de estos dos polos de la economía supondrían para América Latina, el fortalecimiento de un modelo económico más racional, más productivo y más equitativo que allane el camino para un desarrollo y crecimiento más equilibrado de la región.
 La Economía Solidaria.

            Cuando en algunas comunidades se genera una red de gestión empresarial preservando el proceso de economía popular se genera entonces la llamada economía solidaria. En esta la existencia de un compromiso de ayuda y de reciprocidad en el proceso económico es fundamental para su existencia. No obstante, se puede decir que en América existen dos tendencias que intentan definir a la economía solidaria.

Por un lado, la escuela francesa plantea a través de su autor Jean Louis Laville, que la economía solidaria es la constitución de tres factores.

1.     La construcción conjunta de la oferta y la demanda entre los profesionales y los usuarios a partir de una relación reciprocitaria.
2.     La realización de una hibridación relativamente ejemplar de la economía mercantil (el mercado), de la economía no mercantil (El Estado) y la economía no monetaria (el don, la reciprocidad). y
3.     La búsqueda de un equilibrio entre las tres formas de economía precedentes.

En resumen la economía solidaria según Laville plantea que la única forma de corregir las fallas en el mercado que generan cualquiera de las formas precedentes de una economía, es a través de la búsqueda de una alianza entre los actores que intervienen en el proceso económico. En otras palabras que productores y consumidores construyan conjuntamente la oferta y la demanda de bienes y servicios.

Las experiencias de esta interpretación de la economía solidaria se hallan en la gestión de los servicios de proximidad en Francia, Canadá y Bélgica, en donde mediante una relación de reciprocidad las entidades de la economía social están intentando corregir las fallas que el mercado de los servicios presenta.

Pasando a la otra definición de la economía solidaria, en la América del sur, específicamente en Bolivia, Colombia, Perú, Ecuador, Chile, Uruguay y Argentina, la economía solidaria es definida como aquel polo económico nacido de la economía popular en donde se ubican las microempresas ya sea asumiendo como fórmulas jurídicas a las cooperativas, o simples empresas de responsabilidad limitada, que actúan en redes de producción, comercialización y consumo.

El argumento central de esta tendencia, es la lucha permanente por la disminución de los costos de los bienes y servicios que se ven aumentados por las cadenas que se generan en todo el recorrido que realizan los productos hasta llegar al consumidor final.

El papel que ha jugado el movimiento cooperativo ha sido importante en el desarrollo de este polo. Las fortalezas por los años de experiencia han permitido que en muchos países latinoamericanos existan verdaderas redes económicas de solidaridad, que posibilitan el acceso a mayores bienes y servicios a la población.

Las experiencias cooperativas en Colombia, del mercado justo hacia Bolivia, Ecuador y Perú, el movimiento de las ONG para el Desarrollo, son las más significativas manifestaciones que ha tenido la economía solidaria en la América Latina.

La situación en Venezuela.

Venezuela ha sido quizá el país junto a México y Brasil que ha tenido el mayor desarrollo de la economía popular. El  cada vez mayor número de personas insertadas en el mercado informal, el mayoritario desarrollo en las zonas marginales de empresas familiares es una prueba de la existencia de un gran sector  que está compitiendo con el sector privado tradicional.

Sin embargo, la economía solidaria y social no ha corrido la misma suerte. La economía solidaria ha tenido algunas importantes manifestaciones sobre todo en el sector agrícola venezolano con la creación de redes de comercialización que han originado la venta directa del productor al consumidor de este tipo de bienes. Fue con el gobierno del Presidente Rafael Caldera] que se introdujo en Venezuela el concepto de economía solidaria como sustituto en el lenguaje oficial de la economía popular, en este sentido el Programa de Economía Solidaria tuvo los siguientes objetivos:

            “ Generales:
1)Promover un Sistema de autoabastecimiento solidario para la distribución de los alimentos y medicinas a menores precios mediante la organización social.
2) Crear y fortalecer empresas solidarias mediante en los sectores de menores ingresos mediante un sistema de capacitación masiva en gestión”

De esto se puede extraer que en el Estado no se dio un proceso de reflexión política y económica del significado de la economía popular y el tránsito hacia una economía solidaria. Desde nuestro entender, la implementación de la economía solidaria en Venezuela significó una moda del gobierno de turno sin el más mínimo propósito de redimensionar tanto a la economía popular como a la economía solidaria mediante la creación de un Tercer Sector de la Economía: la economía social venezolana.

 De la economía social, las experiencias que se reportan son muy pocas, es crítica la situación económica y profesional de las entidades que bien pudieran transformar su dinámica no gubernamental y no lucrativa en un movimiento empresarial social que tienda a la creación de un tercer sector en Venezuela sólido y competitivo frente al Estado y el sector privado tradicional.

La realidad venezolana es que el debate sobre la economía popular  y la solidaria no ha sido lo suficientemente amplio como para poder definir estrategias que conduzcan a unos lineamientos para la superación de estos polos. Se dice superación porque es obvio que la economía popular y la solidaria tal como están entendidas y manifestadas en el país deben dar paso a un polo económico plural, alternativo y coajustado al resto de los actores económicos del país, incluyendo al promotor principal de la economía: el Estado.

Con respecto a la economía social recién es que en las Universidades y en algunos sectores elites de la sociedad civil es que el tema se está analizando y estudiando. La comprensión de esta manifestación económica podría hallar el camino para la transformación de la economía popular y solidaria venezolana en una economía plural y social
Neoliberalismo:

Neoliberalismo: El término neoliberalismo fue acuñado por el académico alemán Alexander Rüstow en 1938, en un coloquio. Entonces se definió el concepto de neoliberalismo como remarcando «la prioridad del sistema de precios, el libre emprendimiento, la libre empresa y un estado fuerte e imparcial». Para ser neoliberal es necesario requerir una política económica moderna con la intervención del estado. El intervencionismo estatal neoliberal trajo consigo un enfrentamiento con los liberales clásicos laissez-faire, como Ludwig von Mises o Friedrich Hayek. En los años 60 el término dejó de usarse regularmente.
En 1981 se formó un movimiento de izquierda en los EEUU que usaba el término neoliberal para describir su ideología. Los neoliberales se unieron alrededor de dos publicaciones, La Nueva República y el Washington Monthly. El vocero de este neoliberalismo era el periodista Charles Peterers, que en 1983 publicaba el Manifiesto Neoliberal. Los dos políticos neoliberales más influyentes fueron Bill Clinton, 42º presidente del gobierno, y el ex vicepresidente Al Gore.
Durante la dictadura militar de Augusto Pinochet en Chile, los estudiosos opositores usaron el término, aunque sin una referencia específica a una revisión teórica del liberalismo clásico, para describir un conjunto de reformas políticas y económicas efectuadas bajo este gobierno, usando el término de forma peyorativa. El término acabó difundiéndose entre los hispanohablantes. En las últimas dos décadas el término no se define sino que se utiliza para describir una ideología o una teoría económica, y además, es usado por los críticos de izquierda opuestos a la liberalización económica para condenar.
Según Boas y Gans-Morse, el término neoliberalismo es utilizado por la izquierda peyorativamente para criticar las políticas de liberalización del sector privado tendientes a aumentar su rol en la economía. Hoy en día el uso del término se orienta a describir las políticas económicas que «eliminan los controles de precios, desregulan los mercados de capital y reducen las barreras al comercio», además de reducir la influencia del estado en la economía, especialmente mediante la privatización y la austeridad fiscal

El neoliberalismo es, ante todo, una teoría de prácticas político-económicas que afirma que la mejor manera de promover el bienestar del ser humano consiste en no restringir el libre desarrollo de las capacidades y de las libertades empresariales del individuo dentro de un marco institucional caracterizado por derechos de propiedad privada fuertes, mercados libres y libertad de comercio. El papel del Estado es crear y preservar el marco institucional apropiado para el desarrollo de éstas prácticas. Por ejemplo, tiene que garantizar la calidad y la integridad del dinero. Igualmente, debe disponer las funciones y estructuras militares, defensivas, policiales y legales que son necesarias para asegurar los derechos de propiedad privada y garantizar, en caso necesario mediante el uso de la fuerza, el correcto funcionamiento de los mercados. Por otro lado, en aquellas áreas en las que no existe mercado (como la tierra, el agua, la educación, la atención sanitaria, la seguridad social o la contaminación medioambiental), éste debe ser creado cuando sea necesario mediante la acción estatal. Pero el Estado no debe aventurarse más allá de lo que prescriban estas tareas. La intervención estatal en los mercados (una vez creados) debe ser mínima porque, de acuerdo con ésta teoría, el Estado no puede en modo alguno obtener la información necesaria para anticiparse a las señales del mercado (los precios) y porque es inevitable que poderosos grupos de interés distorsionen y condicionen estas intervenciones estatales (en particular en los sistemas democráticos) atendiendo a su propio beneficio. Si bien en la actualidad contamos con muchos análisis generales de las transformaciones globales y de sus efectos, carecemos de un relato político-económico del origen de la neoliberalización y del modo en que ha proliferado de manera tan generalizada a escala mundial. Por otro lado, abordar esta historia desde una perspectiva crítica sirve para proponer un marco para identificar y construir acuerdos políticos y económicos alternativos.
POSTULADOS DEL NEOLIBERALISMO
1.- El mercado lo resuelve todo del mejor modo posible.
2.- Siempre hubo y habrá corrupción, en el liberalismo es marginal y en el estatismo es estructural.
3.- La desigualdad social no es consustancial al capitalismo, sino parte de la naturaleza humana, por eso no es posible acabar con ella.
4.- El nacionalismo y la soberanía económica son expresiones retrogradas que deben desaparecer en aras de la eficiencia y la inserción a la globalización.
5.- Primero hay que hacer crecer la riqueza y, después distribuirla.
6.- Las privatizaciones son la panacea para la economía nacional
Actualmente, en la mayor parte de los países del mundo han desaparecido o tienden a desaparecer las que tradicionalmente se han considerado responsabilidad del estado como la educación en todos los niveles, la salud universal, la vivienda digna, la alimentación, el empleo bien remunerado, el respeto a las diferencias, o la seguridad de un ingreso capaz de garantizar la satisfacción de as necesidades elementales del trabajador y su familia, así como la protección social universal contra los riesgos de vida sin discriminaciones o exclusiones, el diseño y puesta en marcha de políticas de distribución del ingreso, tanto como velar por la consolidación de un sistema democrático que evite la dictadura del mercado y fortaleza la actividad pública de producción y distribución de bienes y servicios básicos.

Es justamente, tomando como referente lo planteado, la Economía Social intenta dar respuesta a una situación de exclusión social en la cual se encuentra inmersa gran parte de la población mundial.

En este contexto, la Economía Social se ha convertido en un medio a partir del cual se concreta la lucha contra la exclusión social canalizando y convocando la participación activa de las personas, creando instancias de concertación y dialogo que posibilitan dicha participación procurando la organización de los individuos con el fin de llevar a cabo diversas actividades destinadas a mejorar sus ingresos, tener acceso a los servicios sociales, hacer valer sus puntos de vista, defender sus intereses, así como negociar sus relaciones frente al Estado y a terceros, potenciando los canales de acceso al desarrollo.

Sin embargo, el concepto de Economía Social es un concepto de desarrollo. Particularmente en nuestro país, esta figura toma nombre de Economía Social y Participativa, Economía asociativa en la Constitución Bolivariana, y en la Ley Especial de Asociaciones Cooperativas aprobadas en el año 2001, así como también de la Economía Popular Productiva, Economía Solidaria entre otras que son evidentes en los distintos planes, programas y documentos de los entes gubernamentales y empresas estatales y estadales. En el artículo 118 de la Constitución establece el reconcomiendo legal a una economía social y participativa que vendría a constituir parte de lo que ha denominado: tercer sector de la economía, que se ubica entre el sistema público y el Privado.

La Economía Social presenta características esenciales e inherentes a su propia condición:

ü  Promueve el desarrollo integral de la persona como un fin en sí mismo, convirtiendo el capital en un instrumento.

ü  Persigue objetivos económicos, sociales y de interés general y colectivo por encima de los individuales.

ü  Contribuye a la incorporación al mercado de trabajo, a la colectiva víctima de la exclusión social.

ü  Promueve la participación activa y voluntaria de las personas en la autogestión, así como la búsqueda de soluciones a problemas comunes.

ü  Contribuye de manera directa a mayores niveles de bienestar social, con visión integral



LA ECONOMÍA SOCIAL Y SU VINCULACIÓN CON LA TRANSFORMACIÓN DEL SISTEMA SOCIO ECONÓMICO DESDE UNA VISIÓN POPULAR Y PARTICIPATIVA.

            La Constitución aprobada en Diciembre de 1999, como el resultado normativo de un proceso constituyente y del cumplimiento, en alguna medida, de la promesa electoral e ideológica de Hugo Chávez, consagra el apoyo del Estado a las nuevas tendencias organizativas en el ámbito de la denominada economía social.

            La política social del Estado venezolano, pasa a partir de 1999 a consagrar normativamente en el texto constitucional, y de una manera más decidida en términos políticos, el reconocimiento, fomento, y apoyo a las expresiones organizativas, asociativas, individuales y familiares, de la denominada economía popular.

            El término empleado para denominar estas expresiones y manifestaciones socio-económicas, fue el “economía popular” (Art. 118 de la Constitución Nacional de Venezuela), y no el de economía informal, denotando con ello, probablemente por parte de la clase dirigente en el poder, una postura conceptual, política e ideológica, que privilegia la legitimidad, organización y potencial político de dichas prácticas, y no su inserción o no en la esfera regulatoria o legal.

            El término de economía social es incluido en el artículo 184 de la CRBV, según el cual, se promueve la participación en los procesos económicos, mediante el estimulo de expresiones de la economía social, tales como cooperativas, cajas de ahorro, mutuales y otras formas asociativas; además que se plantea la promoción de las organizaciones de la economía social por medio de las políticas de Estado. Esto último ratificado en el artículo Nº 300, teniendo como fin fortalecer el desarrollo económico del país, sustentándolo en la iniciativa popular, asegurando la capacitación, asistencia técnica y el financiamiento oportuno.

            A su vez  La Carta Magna, en su artículo 308, (Capítulo I “Del régimen socioeconómico y la función del Estado en la Economía, del Título VI, “Del Sistema Socioeconómico”) establece que “el Estado protegerá y promoverá la pequeña y mediana industria, las cooperativas, las cajas de ahorro, así como también la empresa familiar, la microempresa y cualquier otra forma de asociación comunitaria para el trabajo, el ahorro y el consumo, bajo régimen de propiedad colectiva, con el fin de fortalecer el desarrollo socioeconómico del país, sustentándolo en la iniciativa popular. Se asegurará la capacitación, la asistencia técnica y el financiamiento oportuno”.

            Y determina en el artículo 70 que son medios de participación, las organizaciones que pertenecen al sector de la economía social, haciendo mención a valores como cooperación y solidaridad, dejando ver la concepción de lo económico y social de manera más integral.

            En la actualidad, la discusión relacionada con la Economía Social está inmersa en una visión entre lo ideológico  y lo conocido. Partiendo en torno a una agenda de desarrollo, considerando  prioritario promover la creación de una nueva institucionalidad que debe ser concebida y fundamentada en innovadores principios de organización y participación social.

            Las nuevas formas de organización política, social y económica supone la consolidación y creciente fortalecimiento de la Economía Social y Participativa como una Política de Estado, orientada a suministrar el apoyo financiero necesario para generar empleo productivo y sustentable, siendo ésta una de las estrategias del Gobierno Bolivariano para acatar la pobreza y la exclusión social.

            La Economía Social no debe entenderse como otra de las tantas políticas compensatorias o transitorias para la reactivación de la producción y el empleo. Se trata más bien, de un empleo económico progresivo y complementario, que organiza y refuerza el tejido socio-productivo, que dará el soporte imprescindible para la transformación del modelo de distribución del ingreso y por consiguiente de la democratización del capital.

IMPORTANCIA ESTRATÉGICA QUE TIENE PARA EL ESTADO LA CONSOLIDACIÓN  DE UNA ECONOMÍA SOCIAL, SOLIDARIA Y PARTICIPATIVA. (SEGURIDAD ALIMENTARIA).
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            El modelo económico de la Economía Social es una visión innovadora del gobierno, que procura que las comunidades organizadas a través de cooperativas de producción, así como también, de microempresas, empresas mutuales, familiares, y demás Unidades Económicas Asociativas, se agrupen solidariamente para lograr configurar un nuevo enfoque productivo que contribuya a modificar la relación Estado-Sociedad, impulsando un nuevo orden económico por medio de la participación.

            La Economía Social es la respuesta venezolana, centrada en una dimensión productiva y participativa de la comunidad, al tema de la desigualdad y sus consecuencias: la pobreza y la exclusión social. Es un cambio a fondo del patrón de desarrollo y crecimiento económico. Es nuestro aporte a la Agenda Social de los Pueblos del Sur, para crear un nuevo paradigma económico, basado en la competitividad y la productividad orientada al desarrollo y al crecimiento económico con equidad. Esta nueva racionalidad económica, debe constituirse en una propuesta para todos los ciudadanos, favoreciendo, además, la inclusión de los excluidos del aparato productivo.

            El Estado Venezolano fundamenta su economía social, centrado en el “Buen Vivir”, es decir en el desarrollo del ser humano y el cuidado

            La política de economía social planteada en el proyecto de gobierno, en el plan de la nación, y en los lineamientos de la política social, tiene una visión integradora de lo económico y lo social; como estrategia se impulsan formas de organización alternas como cooperativas, microempresas y otras formas asociativas, orientadas hacia una mayor justicia social y equidad, fomentando la autogestión y la solidaridad.




























CONCLUSIÓN


            La Economía Social  describe la noción de las redes productivas conformadas por miles de unidades productivas pequeñas de carácter comunitario pero de propiedad  social y autogestionaria que provoque un aumento en la producción y hace paréntesis de los tipos de empresas de autogestión y cooperación. Esta economía puntualiza el énfasis sobre las tareas formativas de las comunidades autogestionarias como poderes populares y células primarias de articulación de este sistema productivo.

            Se encuentra  soportada por un conjunto de principios; tales como: la solidaridad, la complementariedad, la cooperación, la equidad, la igualdad, principios que le dan el molde perfecto en la construcción de un nuevo modelo productivo y de construcción de hombre y sociedad nuevos donde se rompa con la relación histórica capital-trabajo para invertir esta fórmula y lograr la emancipación del trabajo y colocar su creatividad en función de la liberación del mismo y no de su propia opresión.

            Las nuevas formas de organización política, social y económica supone la consolidación y creciente fortalecimiento de la Economía Social y Participativa como una Política de Estado, orientada a suministrar el apoyo financiero necesario para generar empleo productivo y sustentable, siendo ésta una de las estrategias del Gobierno Bolivariano para acatar la pobreza y la exclusión social.

            Se encuentra planteada en el proyecto de gobierno, en el plan de la nación, y en los lineamientos de la política social, tiene una visión integradora de lo económico y lo social; como estrategia se impulsan formas de organización alternas como cooperativas, microempresas y otras formas asociativas, orientadas hacia una mayor justicia social y equidad, fomentando la autogestión y la solidaridad.

            La revolución bolivariana lleva consigo pues un proceso donde exalta los valores y principios elevando la dignidad de la persona y la propuesta de un proyecto colectivo de crecimiento y desarrollo capaz de producir para satisfacer las reales necesidades del hombre. Por ello Socialismo y democracia son inseparables.





























Neoliberalismo
Aproximaciones al neoliberalismo como economía mundo, sus categorías de análisis y la consolidación  critica de una macro-estructura
Recordando a nuestro libertador Simon <bolívar en su discurso de angostura dijo
                   “El sistema de gobierno mas perfecto es aquel que produce mayor suma de felicidad posible, mayr suma de seguridad social y mayor suma de estabilidad política”

La seguridad social nace de Alemania como producto del proceso de industrialización; las fuertes luchas  de los trabajadores, la presión de las iglesias y de algunos s grupos políticos y sectores académicos de esa época   estos trabajadores se organizaban en asociaciones de ayuda solidarias, destacándose mutuamente en las cooperativas de consumo y sindicatos para entender el fenómeno del neoliberalismo es importante recordar la evolución que ha tenido la política económica del capitalismo a lo largo de la historia.
Mercantilismo (XV-XVIII)  primera política económica sus teorías la riqueza de una nación residía en la cantidad de oro, plata y metales preciosos que esta tuviera y no en la capacidad de producción. le es inherente el proteccionismo aduanal para impedir que el comercio de otras naciones penetrase su mercado  llevándose el dinero al exterior, busco mayores exportaciones y menores importaciones. Centro las bases del desarrollo manufactureros.
Liberalismo (XVIII-XIX) contrapartida teórica del mercantilismo, esta planteaba la lucha libre del mercado, lo que garantizaba el triunfo de los mas poderosos y a su vez aceleraba la concentración y desarrollo industrial del siglo XIX
Señalando un poco a finales del siglo XIX el capitalismo entra en una fase de desarrollo;
El imperialismo el desarrollo de las fuerzas productivas y de libre competencia propugnada por la ideología y las políticas liberales, propicio un aumento sin limites de la producción que amenazaba frecuentemente con la ruptura del ciclo de reproducción del capitalismo las crisis económicas se hicieron mas profundas y frecuentes, se agravo su complejidad y el mercado automáticamente ya no se bastaba para corregir los nuevos desequilibrios. Este conjunto de condiciones maduraron el calor de acontecimiento históricos como el desencadenamiento de la primera guerra mundial, al triunfo de la revolución socialista, progresivamente se plateaba la necesidad de la seguridad de la regulación del ciclo económico para conservar la estabilidad del régimen capitalista.
El neoliberalismo, como política tecnocralica y macro económica y no propiamente filosófico, tiene unadimensioin geopolítica mercantilista ajena en ka practica al neoliberalismo no es necesariamnet sinónimo de marcado libre, sin trabas burocraticas ni privilegios sectoriales, razón que explico que sea asociado al cooperativismo internacional.
Las políticas macro económicas recomnedadas por teoricios o ideólogos neoliberales en principion recomendaciones a países tanto industrializados como en desarrollo incluyen;   políticas monetarias restrictuivasc aumentando las tasas de interesee o reducir la oferta de dinero. Con ello disminuye la inflación y se reduce el riegos de una devolución. No obstante con ello se inhibe el crecimiento económico ya que se dsminiya el flujo de exportaciones y se apertura el nivel de deuda externa e interna denominbada en moneda extranjera, evitando los ciclos del mercado ;politocas fiscales restrictuivas, aumentar los impuestos sobre el consumo y reducir los impuesto sobfre la producuuion y la renta, eliminar regímenes especiales, disminuir el gasto publico; con ello se supone que se insentive la inversión, se sanean las finanzas publicas y se fortalece la efectividad del estado.
Los detractores  delcapitalkismo (socilaistas economistas) asi como algunos críticos del mercado libre suelen usar el concepto de forma peyorativa como una generalización sobre cual quier posición que pomga fin o limites al intervencion de los  estado  en lsa economis
 
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

ü  Red de Centros de Formación Sociopolítica Negro Primero (2005)
ü  Revista "Contribuciones a la Economía" :La Economía Social Solidaria: Redes Productivas (2008)
ü  Temas de Derecho Para Luchadores Sociales Venezolanos (2003)
ü  Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999)
ü  Ley para el Fomento y Desarrollo de la Economía Popular (2008)

FUENTES DE INTERNET

ü  www.voltairenet.org/Economia-social